Archivo del blog

miércoles, 1 de junio de 2011

Debemos aprender todo lo que el pueblo japonés


Debemos aprender todo lo que el pueblo japonés ha mostrado ante la emergencia nacional que sufrieron con el terremoto y el tsunami.

Platíquenlo a sus alumnos.

10 COSAS QUE DEBERÍAMOS APRENDER DE JAPÓN

1. LA CALMA 

 Ni una sola imagen de golpearse el pecho o de dolor. La muestra de dolor en sí ha sido dignamente y calladamente llevada.

2. LA DIGNIDAD
La disciplina en las colas para el agua y los alimentos. Ni una palabra áspera o un gesto de grosería o ventajismo egoísta. 

3. LA CAPACIDAD 

De los arquitectos, increíble, los edificios se balanceaban, pero no caían. La reconstrucción vial fue increíblemente eficiente.

4. LA CONSIDERACIÓN

La gente compraba sólo lo que realmente necesitaba para el momento, por lo que todo el mundo podía conseguir algo.


5. EL ORDEN 

No hay saqueos en las tiendas. No tocan la bocina y no adelantan en las carreteras. Sólo hay comprensión y respeto mutuo. 

6. EL SACRIFICIO

Cincuenta trabajadores quedaron atrás para bombear agua de mar en los reactores nucleares sin importarles la muerte segura que les esperaba y solo fueron cincuenta porque ese fue el número que se determinó como mínimo. Pero hubo cientos de voluntarios.

7. EL SENTIDO DE RESPONSABILIDAD 

Los restaurantes redujeron los precios. Y pese a la fuerte demanda, no se sabe de ningún comerciante ni mayorista ni minorista que no haya rebajado los precios y vendido a menos del costo de existencia. Los agricultores regalaban sus cosechas.  En fin, se hizo realidad aquél principio de la ética de los Samurai que dice que: “ El fuerte cuida a los débiles”.

8. LA FORMACIÓN

La gente de edad y los niños, todo el mundo sabía exactamente qué hacer. E hicieron precisamente eso. 

9. LOS MEDIOS DE COMUNICACIÓN

 Ellos mostraron moderación magnífica en los boletines. Ningún periodista publicó tonterías, ni sensacionalismos morbosos: únicamente reportajes para difundir la calma. 

10. HONRADEZ

Cuando se cortó la luz en las tiendas, la gente volvió a poner las cosas en los estantes y se marchó en silencio. ¡Nadie se llevó producto alguno! 

No hay comentarios:

Publicar un comentario